Quiénes somos
Nuestra historia comienza en el año 1999 con un viaje de turismo a Senegal del cual volvimos impactados por la gente y la belleza de África. Luego fuimos descubriendo Malí, Burkina Faso, la República Sudafricana y, en los últimos tiempos, Togo y Benín. En cada uno de estos viajes iban surgiendo propuestas de apoyo, casi siempre a través de los misioneros de cada zona, hacia un niño, una familia, una pequeña escuela… Aquello fue creciendo, tanto en cuanto a las peticiones de apoyo como en lo relativo a las personas que aquí manifestaban su deseo de ayudar, unos con la esperanza de que ese pequeña ayuda llegara y otros con la ilusión de poderla ofrecer.
En estos países del tercer mundo hay un colectivo especialmente desfavorecido, más allá de la mera pobreza económica o de la ausencia de bienes de tipo material: el de los niños con necesidades de atención especiales, bien por graves problemas físicos o psíquicos, como por razones sociales, culturales o de entorno.
No se trata ya de que estén en grave riesgo de exclusión social, sino de que llegan a carecer de la más mínima calidad de vida, no pudiendo optar a ayuda alguna al ser esta costosa o con una duración indefinida cuando se trata de enfermedades incurables.
Descubrimos también muchos proyectos, pequeños en su tamaño pero inmensos por el cambio que pueden suponer para sus destinatarios, que con frecuencia quedaban fuera de otro tipo de ayudas, tanto por falta de medios como, en muchas ocasiones, por desinterés o por su finalidad: enfermos de sida, cárceles, orfanatos, sanatorios mentales… Detrás de cada uno de estos pequeños proyectos hay muchas personas sin otra esperanza que la ayuda desinteresada que puedan recibir.